miércoles, 29 de octubre de 2008

Cuando la nieve asoma...

Siempre me dice mi madre que no entiende porqué me pongo tan contenta cuando empieza a "barruntarse" la nieve. Ella dice que se nota que nunca la he tenido "que sufrir", porque ella de eso sabe y mucho. Quizás tenga razón, porque lo máximo que la nieve me ha impedido ha sido llegar a casa alguna que otra vez a la hora que tenía pensada cuando venía de Madrid, pero poco más.
La cosa es que tiene razón, me gusta la nieve, me da tranquilidad, y me carga las pilas. Y que conste que no es por el pensamiento de poder esquiar en breve (que también), sino porque no cambio por nada del mundo un paisaje de mi pueblo con nieve, ni el compadreo que se establece entre sus gentes (y también con los foráneos) ante las condiciones adversas, ni el olor a invierno de esos días, ni el calor de una chimenea con historias de abuelos, ni una salida de la cuadrilla "a monte" para dejarnos caer por "el caserío", "la revía" o "las vallejas"...
¡¡Que baje la nieve ya, que hoy solo asomó por Jano, Juntarés y Montabliz!!

Ya se que a mucha gente le puede ocurrir lo contrario, y es que ya lo sé, la nieve no es tan bonita para quienes vivimos "con ella", como para quienes alardeando de conocedores de estas situaciones, no son más que,(y que se me perdone la expresión) "domingueros". Que se lo pregunten si no a los obreros de Viesgo en el embalse de Alsa, que en cuanto aparece la nieve por allí se hartan de ayudar a estos "turistas invernales" y sacar sus coches de las cunetas...en fin...que hay para todos.

Así que, por mucho que mi madre no lo vea muy normal, me gusta la nieve ¡joder!

Por cierto hoy recordé una estrofa de una canción campurriana que en voces de una ronda pone los pelos de punta(Si alguien añade alguna más...yo ahora no recuerdo como sigue):

"Si la nieve se hiela
qué harán las rosas.
Se estarán marchitando
las más hermosas"

3 comentarios:

Julio Varillas dijo...

Buah Rojo es el Color, con este post me has ganado. Me encanta la nieve y estoy completamente de acuerdo con tu post, son días mágicos, y eso que yo en Hormiguera si que he llegado a pasarlas canutas unas cuantas veces eh, han caido buenas nevadas alli.
Un beso!

Anónimo dijo...

A ver pijilla. Cuando hablas de esquiar me imagino que te referirás a sentar el culo en un trozo de plástico y bajar por una cuesta de vértido ¿no? Eso es esquiar y no lo que hacen los "jets sets" de la capi los "güiquends" en la estación invernal de Alto Campoo.

Soy de tu misma opinión: lumbre, castañas, parchís y cuando amaina, plástico y bajada a 100 por hora.

Que nieve, que nieve.

Rukaegos dijo...

"Ay, amor, / si la nieve se hiela, / ¿qué haré yo?"

Ese sería el estribillo que seguiría a la copla que apuntas. Y luego muchas otras bellas también y melancólicas como la nieve.

Uno de los mejores recuerdos de tantos años viviendo en Reinosa es la luz particular de las mañanas nevadas, la sensación de ser el primero en pisar algún nevero camino del colegio, los juegos asociados a la nieve ...